Wednesday, June 13, 2007

DOCE HORAS

Aun no he mencionado que Raúl está teniendo que ir y venir a Sevilla cada día. Es todo un esfuerzo que se qué para él merece la pena, y que espero que él sepa cuánto valoramos nosotros. En cualquier caso, en unos días se mudará a la casa báltica del jardín y todo será estupendo, aún mas estupendo.

Así las cosas, hoy hemos grabado casi todas las líneas de bajo y varias guitarras. Alguna canción está ya lista casi para grabar la voz. Es bastante probable que mañana empiece a cantar algunas, ya veremos como tengo la garganta.

Miércoles. Llevamos sólo tres días aquí y estamos tan hechos a esto que a mí, por lo menos a mi, me da la sensación de que no va a ser sencillo dejar la casa del jardín. Un día de estos dedicaré un capítulo de este diario a contaros y enseñaros este refugio blanco. Es una mezcla entre uno de esos Lofts pequeños de NYC y un Iglú. Es perfecto. Yo, al menos yo, viviría aquí.
La relación con Paco Loco es cada vez mejor. No ha sido tensa, rara o espesa en ningún momento, y la verdad es que está siendo un tiempo muy tranquilo, para la tensión que puede llegar a generarse en la grabación de un disco. Sin embargo no, el momento de tensión más relevante de la tarde (y de lo que llevamos aquí) han sido los aproximadamente dos minutos que hemos tardado en decidir quién habría las galletas de limón y uvas que Muni nos trajo para merendar mientras Paco Loco grababa una guitarra acústica para To Seychelles.

A última hora de la tarde hemos estado trabajando sobre Bergen, y sólo diré que de repente, Kiko y Javí, en esta foto, tocaban las palmas. Si, las palmas. Ha sido muy divertido.
Y al final de la tarde hemos pasado un rato grabando las primeras guitarras de Bergen, una de las canciones que más ha cambiado respecto a las demos que grabamos en Diciembre. La verdad es que hay varios cambios sustanciales, era de esperar. Bergen habla ahora de lo mismo, claro. La letra es básicamente la misma pero, al haber pasado más tiempo desde que la escribí, me apetecía hablar de algunos cambios acaecidos en mi interpretación de los hechos que provocaron que escribiese Bergen.
Estamos deseando enseñaros todas las canciones.

Pero se hizo de noche y no puedo dejar de mencionar la excelente cena de Muni, durante la que hemos sabido que en pocos días tendremos una visita ilustre. También dedicaré un capítulo a esta mujer, como parte esencial del engranaje diario en esta casa.

Otra noche más, muy cansado pero muy satisfecho. Gracias por leer. Buenas noches.

e.